Colgante diosa Tanit.

Colgante de la diosa Tanit.

Cabeza de Tanit (Kore-Perséfone) hacia la izquierda, adornada con pendientes y coronada con espigas de trigo y el caballo alado Pegaso volando, debajo la leyenda en letras púnicas B´RST.

Medidas: 4 cm

Material: zamak

Peso: 24 gr.

Tanit.

Tanit era la gran madre púnica, la más importante de las diosas del panteón cartaginés, era diosa del cielo y la fecundidad femenina, garante del crecimiento y la salud, proveedora de lluvia, diosa de la agricultura, del más allá, diosa guerrera y diosa patrona de Cartago junto a su consorte Baal Hammon

Sus atributos eran: el delfín, la espiga, el triángulo o la flor de loto

Parece que correspondería con la antigua diosa fenicia Astarté que a partir del siglo V a. C en el panteón fenicio, la pareja de dioses Astarté – Melkart es reemplazado por Tanit – Baal Hammon en las principales ciudades fenicias (Tiro y Sidón).

Pegaso. (Πηγασος).

Era un caballo alado, hijo de Posidón y la Gorgona o bien nacido de la Tierra fecundada por la sangre de la Gorgona al ser matada por Perseo. Al nacer voló al Olimpo y se puso al servicio de Zeus, llevándole el rayo. Este caballo desempeña un papel importante en varias leyendas sobre todo en la de Belerofonte o Perseo. Cuando el concurso de canto que enfrentó a las hijas de Píero (Piérides) con las Musas, el Helicón, complacido fue hinchándose, amenazando llegar al cielo. Por orden de Posidón, Pegaso golpeó la montaña con uno de sus cascos para ordenarle que volviera a sus dimensiones ordinarias. El Helicón obedeció pero en el lugar en que Pegaso le había dado el golpe, brotó una fuente, Hipocrene, o fuente del caballo.

Belerofofonte.  (Βελλεροφοντης).

Hijo de Posidón aunque su padre humano es Glauco, rey de Corinto. Este héroe mata por accidente a su hermano y busca purificación en Tirinto, en la corte del rey Preto que lo purifica pero la esposa de este, Estenebea, se enamora de Belerofonte y le pide una cita a lo que Belerofonte se niega, Estenebea dolida se queja a su marido de que el joven a querido seducirla. Preto, ante esto le envía a la corte de su suegro Yobates, rey de Licia, con una carta en que pedía a su suegro que diera muerte al portador de la misiva ya que Preto no quería matar al joven porque había sido su huésped y temía ofender a los dioses al romper los lazos de la hospitalidad. Yobates, cuando lee la carta ordena a Belerofonte que mate a la Quimera, monstruo que era por la parte anterior león y por la posterior dragón y con una cabeza de cabra que lanzaba llamas. Este monstruo devastaba el país y mataba a hombres y rebaños, pues Yobates pensaba que en esta empresa el joven encontraría la muerte.

Belerofonte puede lograr esta hazaña gracias a la ayuda de Pegaso, el caballo alado que le ayuda a precipitarse contra ella y matarla de un solo golpe.