Espintria VIIII.
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Reproducción de las Espintrias (Espintria VIIII), monedas eróticas acuñadas para pagar en prostíbulos. Aparecen en el anverso una prostituta con un joven en alguna postura sexual y en el reverso el número en número romanos rodeado por una orla de puntos en el interior de una laurea. (VER DESCRIPCIÓN)
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Descripción
ESPINTRIA VIIII.
Moneda: Espintria VIIII.
Ceca. Roma. (42 a. C – 37 d. C)
Material: Zamak
Inscripciones:
Anverso: Anepígrafa.
Prostituta en postura sexual con un joven.
Reverso: Anepígrafa.
El número en números romanos rodeado por una orla de puntos en el interior de una laurea.
LAS ESPINTRIAS. REPRODUCCIÓN.
Son monedas de bronce o latón acuñadas en tiempo de Tiberio. Había cerca de cuarenta tipos, también en algunas aparecían penes con alas, actos sexuales entre hombres o actos sexuales entre animales sin embargo dieciséis son los más conocidos. Medían unos 20mm. y pesaban 4 gramos más o menos, aparecieron por todo el imperio aunque en pequeñas cantidades por lo que se cree que su circulación fue escasa, aunque Marcial las llama “lasciva nomismata” se las conoce con el nombre de spintrias a partir del siglo XVII quizá por una traducción incorrecta del libro de Suetonio “Vida de Tiberio”XLIII.
Sobre su origen la opción más generalizada es que eran unas monedas especiales usadas en prostíbulos y burdeles para que por una parte no se mancillara la imagen de dioses o emperadores que aparecen en los anversos y reversos de las monedas y por otra para que las prostitutas que muchas veces eran esclavas venidas de lugares lejanos del imperio pudieran superar la barrera del idioma y entenderse con los clientes en cuanto al precio o el servicio pretendido.
Otra teoría dice que fue Tiberio quien las mandó acuñar para usarlas en sus juegos sexuales en su última etapa de emperador cuando se retira a la isla de Capri.
En Roma el que una persona visitara un prostíbulo no estaba considerado como algo indecente y la prostitución era algo reconocido y gravado por el estado y un servicio normal podía costar entre 2 y 10 ases. El estado romano prohibía el uso de moneda normal para pagar en letrinas, circos, teatros y prostíbulos y han aparecido también tarjetas de bronce para entrar en esto lugares.
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