S.S.7. Sestercio de Caracalla. Marte.

SESTERCIO DE CARACALLA. MARTE.

Moneda: Sestercio.

Ceca. Roma, 214  d. C.

Material: Zamak

Inscripciones:

Anverso: M AVREL ANTONINVS PIVS AVG GERM.

Busto laureado, drapeado y con coraza a derecha.

Reverso:

P M TR P XVII IMP III [COS IIII P] P.

Marte de pie a la izquierda, sosteniendo la Victoria con la mano derecha extendida y apoyado en el escudo, la lanza en la mano izquierda, debajo de los pies casco, cautivo arrodillado a la izquierda; S-C a través de los campos.

CARACALLA.

Lucio Septimio Bassiano (188 – 217 d. C), Lugdunum – Edesa. Emperador 211 – 217.

Su nombre hace referencia a la capa[1] de origen galo cuyo uso introdujo en Roma y que llevaba con frecuencia. Nace en Lugdunum, mientras su padre servía como gobernador bajo Cómodo, mientras que su hermano Geta nace 11 meses más tarde. Hijo de Septimio Severo, gobernador romano de la Galia Lugdunenesis y Julia Donna. Septimio Severo tras ocupar el poder le nombra César con 7 años, le cambia el nombre de Lucio Septimio Bassiano a Marco Aurelio Antonino y le incorpora como tercer coemperador junto con su hermano Geta. Con este cambio de nombre intenta legitimarse en el poder con la idea de enlazar la dinastía de Severos con la dinastía Antonina. En el 200 por orden de su padre se casa con Fulvia Plaucila, un noble romana, hija del prefecto de pretorio Plautiano, que había gobernado Roma, mientras Septimio Severo estaba en Oriente, no tuvo hijos y tres años más tarde se separó tras la acusación de traición a Plautiano y su ejecución. A la muerte de su padre se repartió el imperio con su hermano Geta con quien siempre tuvo una mala relación pese a los intentos de su padre por congraciarles. Esta rivalidad culmina con su asesinato en el 211 en el palacio y ante los ojos de su madre. Tras este asesinato ordenó una campaña de ejecuciones masivas contra los partidarios de su hermano. Casi 20.000 personas entre apoyos de su hermano y testigos del asesinato fueron ajusticiados granjeándose así el odio de la población romana. Conocedor de la situación un año después abandona Roma para no volver y se embarca en campañas militares exteriores, primero en Germania donde pacifica la frontera y luego en Grecia y Pártica, donde es asesinado por una conspiración palaciega dentro de su propio ejército encabezada por Macrino, prefecto de los pretorianos. Murió con 29 años, a instancias de Julia Donna el ejército nombra nuevo emperador a su sobrino Heliogabalo.

Su aportación más importante fue la llamada Constitutio Antoniniana en el 212 por la cual extiende la ciudadanía romana a todos los habitantes libres de las provincias del imperio en un deseo quizá de aumentar los ingresos fiscales y dar unidad al imperio ayudando a la romanización.

Embelleció Roma con muchas construcciones: vías, acueductos, templos y sobre todo las impresionantes termas que llevan su nombre.

En el sistema monetario introdujo una nueva moneda el Antoniniano, acuñada en plata que equivalía a 1,5 o 2 denarios.

[1] Capa con capuchón que llegaba hasta las talones.